sábado, 21 de julio de 2012

Capítulo 10 (Editado)

Día 1
-Damas y caballeros, ¡que empiecen los Septuagésimo Cuartos Juegos del Hambre!- exclama Claudius Templesmith.

Los tributos están en sus círculos metálicos expectantes. Tienen sesenta segundos hasta que las minas que rodean la Cornucopia se desactiven, lo que les da tiempo para ver el terreno a su alrededor (un pequeño regalo de despedida). Cada uno mira a un lado distinto hasta que localizan su destino. 

10, todos observan las pantallas casi sin pestañear, 9, en cada distrito, 8, cada familia, 7, cada persona, 6, cada ser que conoce, 5, o no, 4, a alguno de los tributos, 3, miran expectantes, 2, dolor, lágrimas, sufrimiento, 1... Ya no hay marcha atrás. Suena el pitido que da inicio a la lucha. La mayoría de los tributos corren hacia la Cornucopia donde se han colocado estratégicamente un montón de mochilas y armas de las que dependerá la supervivencia del que lo coja. Varios tributos, entre ellos el grandote del 11, corren hacia el bosque, el lago y el campo de trigo huyendo de la acción. Hacen mal. Puede que la Cornucopia sea un baño de sangre pero si te internas tú solo en el bosque sin nada más que tu ropa lo más probable es que mueras. Además ¿qué gracia tiene que huyan para morir de frío o de hambre? Lo interesante es que se maten entre ellos, que luchen y mueran.

No llevan ni una hora y la tierra de alrededor de la Cornucopia ya está teñida de sangre. Aunque muchos han matado es Cato quien ha matado a la mayoría de los tributos que yacen sin vida, y ahora mismo está luchando contra otro que cae muerto a sus pies. Él junto al resto de profesionales entran en la Cornucopia y cogen lo que les place. Me he encargado personalmente en los últimos minutos de que añadieran un par de regalitos. El arco sencillo plateado está ahora en manos de la chica del Distrito 1, Glimmer, que no es capaz ni de acertar en un blanco fijo. Cato se acerca a mi regalo. Frente a él, en una de las paredes interiores de la Cornucopia, hay todo un repertorio de espadas. No son como las de los entrenamientos, éstas son más grandes, pesadas, manejables y mortales que las que hay en el centro de entrenamiento. Cato se acerca a ellas y la cámara le enfoca mientras con una sonrisa elije su arma.

-Ahora sí pueden empezar los Septuagésimo Cuartos Juegos del Hambre.- dice en un susurro lo bastante alto para que lo oigan las cámaras mientras coge su espada.

Se ha decantado por la más grande de todas, una espada de estilo antiguo con una hoja plana pero fuerte una empuñadura de cuero negro, la guarnición de oro bruñido y el pomo redondo con el sello del Capitolio. La levanta y la sopesa con cuidado. De un sólo movimiento rompe la mesa de madera dónde están los carcajs llenos de flechas. La mayoría de flechas quedan esparcidas por el suelo y los carcajs se parten cuando el segundo mandoble se dirige a ellos. Clove, la compañera de Distrito de mi chico, se acerca a él y le sonríe.

-Vamos a por el resto- le apremia.

Vaya, parece que la subestimé, al final va a ser tan sangrienta como Cato. Sin embargo él rehusa su petición y ordena a los que están de su lado que empiecen a ordenar las provisiones. Preparan un gran campamento al lado del lago. Hacen una pila con las provisiones y tras alimentarse de nuevo y reponer fuerzas se ponen en marcha.

 Ya es de noche pero, rebuscando entre las provisiones han encontrado varias gafas de visión nocturna. Cogen dos gafas, sus armas y se disponen a partir cuando Cato, que es claramente el líder, les para y les avisa.

-Si encontráis al chico amoroso no le matéis, nos llevará hasta la estúpida de su Distrito.

Todos asienten. Dejan a uno vigilando con varias armas y se internan en el bosque. No han andado ni un kilómetro cuando se encuentran con alguien tirado en el suelo. El cara de pan yace tirado boca arriba en el suelo, lleno de moratones y con sangre en la cara. Cato ordena que le despierten y le den agua. El cara de pan se despierta y casi muere de un infarto al ver a Cato.

-¿Me vas a matar?- pregunta casi con lágrimas en los ojos.

Los profesionales ríen con ganas, sí que es tonto este chico. Y Cato... Me ha decepcionado, habíamos hecho un trato...

-Eh, no hace falta que disimules.- le tranquiliza Cato.- Te han visto en los entrenamientos, eres fuerte. – Todos asienten- Ya es hora de que dejes bien alto a tu distrito por una vez.

-Te recuerdo que ya una vez tuvimos ganador- le interrumpe Peeta. Quizá tenga más agallas de las que me esperaba.

-De acuerdo, no vamos a entrar en detalles, te presento a mi equipo – Cato señala a todos los que le acompañan – quiero decir, a nuestro equipo- le tiende la mano para que se levante y le dedica una sonrisa de complicidad.

Así que Cato si siguió mis instrucciones, tal y como le indiqué. Bien hecho. Y resulta que no es ningún tonto ese del distrito 12.

El cara de pan procesa la información con rapidez pero algún pensamiento cruza su mente porque frunce el ceño, pensativo. A saber qué diablos tendrá este lunático en la cabeza. Finalmente se ponen de nuevo en marcha. Mi pantalla central se centra en los profesionales mientras que la que está a mi derecha muestra las imágenes que ve el resto de Panem. Y ahora están viendo cómo la rebelde se duerme subida a un árbol. Las siguientes imágenes muestran a mis chicos y cómo acechan a alguna idiota a la que se le ha ocurrido encender un fuego. ¡Espera! Está al lado de la rebelde. No me lo puedo creer van a estar al lado de ella y ni siquiera lo saben.

11 comentarios:

  1. ¡Se os echaba de menos! Madre mia, esta genial incluso sin editar!
    Muxus!

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    1. Perdón nuevamente por la tardanza, pero ya teneis el capítulo terminado.
      Gracias por vuestra paciencia.

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  2. Se echaban de menos vuestros capitulos, menos mal que ya tenemos el capitulo 10 :)
    Me encanta el capitulo, hasta sin editar es maravilloso
    Besos

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    1. Perdón nuevamente por la tardanza, pero ya teneis el capítulo terminado.
      Gracias por vuestra paciencia.

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  3. Olaa, jeje editado o sin editar, esta genial. Me ha encantadoo y seguid asii que se os echaba mucho de menos¡!

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    1. Perdón nuevamente por la tardanza, pero ya teneis el capítulo terminado.
      Gracias por vuestra paciencia.

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  4. Hola!! Por fin puedo comentar en vuestro blog ^^ Siempre me ha impresionado cómo escribíais sobre el punto de vista del presidente Sonw y en este capítulo tampoco me habéis defraudado. Seguid así ;)

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    1. Muchas gracias, y perdón nuevamente por la tardanza, pero ya teneis el capítulo terminado.
      Gracias por vuestra paciencia.

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  5. oh me ha encantado esta novela que llevais, soy muy fan de LJDH y siempre quise saber como lo vivia snow. Ahora vosotras le habéis dado forma! Me encanto, escribis muy bien
    Un beso cielo!
    http://amormasalladelaunicidad.blogspot.com.es/

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    1. Muchas gracias (:
      Miratenuestro concurso por si te interesa participar (:

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  6. haver kuando poneis mas k no puedo espaerar mas llevo 3 semanas esperando!!

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